miércoles, 13 de agosto de 2008

El Bosque Encantado


Salía todos los días a pasear por el bosque encantado, así le llamaba ella, la pequeña princesa de los cabellos de oro.
Su bosque encantado, su más maravilloso descubrimiento, su esperado sueño.
Toda una vida había soñado con él, y ahora su sueño se había cumplido.
Le gustaba saltar, correr y bailar con las ninfas del bosque.
Las hadas revoloteaban a su alrededor, y los duendecillos la seguían allá donde fuera.
Iraida había cambiado su castillo de cristal, está vez por un bosque encantado, magnífico, hecho para soñar.

- ¿A donde vas, pequeña? -escuchó detrás de ella.-

La pequeña princesa se dio la vuelta, buscando de quién era aquella voz masculina, dulce, tentadora y desafiante a la vez.

- Han pasado quince años. La última vez que te vi eras un bebé, y yo un alegre niño. -dijo aquel muchacho.-

Un muchacho risueño, guapo y encantador, de tan sólo veinte años, la miraba con cariño, ternura, amor, deseo.

Un cumulo de sentimientos que afloraban ahora en la dulce Iraida.

3 comentarios:

felipoween dijo...

Hola!!! Gracias por dejar tu comentario en mi blog..

Una bonita historia.. todo el mundo a vivido alguna,, pero los cuentos se acaban y la realidad es mas dura...

Un abrazo y gracias

La Chica Piruleta dijo...

De nada!!
Solo son historias inventadas...porque me gusta escribir novelas...ya se que la realidad es dura...pero es bonito escribir y olvidarte por un rato de esa realidad!!

Besos

Calvosaez dijo...

Que chula esta ultima amorcito, como mezclas fantasia y amor, ni siquiera se nota el cambio,algun dia conseguiras tu sueño de ser escritora.